¿Te cuesta cantar? ¡Haz esto para que el mantra cobre vida!
Lo que haces fuera de tu sesión de meditación afecta tu práctica mientras meditas. Si te cuesta cantar o profundizar tanto como quisieras en la práctica, este artículo es para ti. A menudo, hacemos todo lo posible por concentrarnos cuando nos sentamos a cantar, pero en realidad es lo que hemos hecho o dejado de hacer fuera de ese tiempo, lo que tiene un gran impacto en nuestra experiencia. Quiero compartir cinco de los desafíos más comunes que enfrentan los profesionales y sus soluciones a continuación. Si encuentra algo relevante para usted, concéntrese en ese aspecto y trabaje en él, en lugar de tratar de hacer todo a la vez.
- Rutina - ¿Se acuesta y se levanta a horas intempestivas todos los días? ¿No tienes un horario fijo para el trabajo, la familia, las tareas domésticas, el estudio, el ejercicio, la meditación, etc.? La falta de organización conduce a la inestabilidad. Inestabilidad en la vida, inestabilidad en la mente e inestabilidad en la meditación. Así que intenta organizar tu tiempo, establece una rutina y cúmplela en la medida de lo posible. Lo mejor es meditar por la mañana temprano (¡incluso mejor antes de que salga el sol!) antes de que comience toda la actividad y el ajetreo del día. Conviértelo en una prioridad. Marcará la pauta de todo el día. Como se suele decir, lo que bien empieza, a medias acaba. Por eso enseñamos el canto del maha mantra Hare Krishna, para proporcionar una base sólida a una mente que, de otro modo, sería inestable. Es un ancla para que se sostenga y se estabilice.
- Restricción: ¿Alguna vez dejó que una persona, una situación o un objeto sacara lo mejor de usted? ¿Cedido a una tentación? ¿Hiciste algo que sabías que no deberías haber hecho? Ya sabes lo que pasa después. Hay consecuencias. Te sientes culpable. Te sientes decepcionado. No logras tu objetivo. Y lo más importante, refuerzas la creencia de que eres incapaz de disciplinar. Nuestros sentidos, deseos y emociones nos empujan en cien direcciones diferentes todo el tiempo. Distrayéndonos. Buscando soluciones rápidas, gratificación instantánea, un golpe inmediato de sensaciones placenteras. Cuanto más cedemos, más permitimos que nuestro medio dicte nuestras elecciones, acciones y comportamiento, más nos convertimos en un bálsamo para nuestros impulsos. Rompe este patrón. Tomamos fuerza y encontramos refugio en nuestro canto.
- Respeto: nuestras vidas ocupadas nos dejan poco tiempo para el respeto. Corremos tratando de hacer esto, aquello y lo otro como robots programados. Nos olvidamos de respetarnos a nosotros mismos, nuestra verdadera naturaleza. Nos olvidamos de respetar a las personas por lo que son. Nos olvidamos de respetar la naturaleza. Como resultado, todo nuestro ser se vuelve ofensivo. Abrasivo. En desacuerdo con el mundo. No hay lugar para que verdades superiores como la confianza, la fe, la gratitud y la devoción se manifiesten en nuestra vida y en nuestra conciencia. Esta vida, este mundo, la gente, son todos regalos sagrados para nosotros. Pretende recordarnos la existencia de la divinidad en nuestras vidas. Pretende llenarnos de asombro, respeto, humildad y gratitud. Vivir de manera que haya reconocimiento y respeto por lo sagrado en nosotros y en todo lo que nos rodea.
Ahí vas. Las Tres R que te ayudarán a cantar Hare Krishna. Siga estos y estoy seguro de que verá una mejora. Háganme saber en los comentarios si esto fue útil. Si hay áreas específicas de mejora o desafíos que desea discutir, no dude en escribirme. ¡Feliz canto! Hare Krishna Hare Krishna Krishna Krishna Hare Hare Hare Rama Hare Rama Rama Rama Hare Hare.
- Venu Gayak das